¿Cómo funciona?
El modo regenerativo se activa durante la frenada, permitiendo al sistema KERS convertir parte de la energía cinética del vehículo en energía eléctrica, evitando que ésta se disipe en forma de calor.
La energía eléctrica es almacenada en ultracondensadores, los cuales proporcionan una alta velocidad de carga y descarga, además de una alta ciclabilidad, siendo estas las características ideales para aplicaciones de start-stop.
En modo tracción, el sistema es capaz de entregar par adicional durante las aceleraciones. Esto permite que el motor diésel trabaje en el régimen óptimo durante el mayor tiempo posible.
Mediante el desarrollo de un algoritmo de control optimizado para una ruta dada, pueden reducirse los regímenes transitorios del motor
de combusión, contribuyendo a una reducción del consumo total de combustible de entre un 15 – 30 %, dependiendo de la ruta.
Rango de sistemas KERS
La propulsión eléctrica presenta diferencias y particularidades importantes frente a la tracción tradicional basada en motores de combustión interna. Haciendo uso de nuestra experiencia y conocimiento de la tecnología de sistemas de tracción eléctricos, hemos creado tres paquetes KERS para diferentes tipos de vehículos y tonelaje.
EMK-750
Tipo de vehículo
Tara objetivo
3.5 to 10 toneladas
Configuración híbrido
P3 (+info)
EMK-1200
Tipo de vehículo
Tara objetivo
10 to 22 toneladas
Configuración híbrido
P0 (+info)
EMK-2200
Tipo de vehículo
Tara objetivo
22 to 44 toneladas
Configuración híbrido
P4 (+info)
Beneficios principales
Reducción en el consumo de combustible
Consigue hasta un 30 % de ahorro en el consumo de combustible, dependiendo del ciclo de conducción y la optimización del sistema de control.
El KERS ayuda a aumentar la eficiencia energética del vehículo, especialmente en aquellas situaciones donde el motor diésel presenta un rendimiento muy bajo. Esto hace que sea especialmente adecuado para vehículos con recorridos urbanos.
Ahorro en mantenimiento
Reduce el coste de mantenimiento del vehículo mediante el uso de frenada regenerativa. Al recuperar energía de la frenada, los componentes del sistema de frenada y de la transmisión sufren un desgaste mucho menor.
Además, el KERS entrega la energía durante la aceleración del vehículo, absorbiendo los transitorios del motor de combustión y reduciendo el deslizamiento del convertidor de par.
Instalación en vehículos existentes
El sistema de recuperación de energía cinética puede ser instalado directamente en vehículos ya existentes y mejorar así su eficiencia energética.
La interfaz con el vehículo se encarga de controlar la frenada regenerativa sin que esto afecte al conductor.
Reducción en emisiones
La frenada regenerativa permite reducir las emisiones de forma proporcional al ahorro en combustible.
La reducción en emisiones de gases de efecto invernadero y de partículas puede tener ventajas fiscales en algunos territorios, además de permitir acceso a zonas restringidas a vehículos de bajas emisiones.
Larga vida útil
Todos los componentes de los sistemas KERS tienen una alta fiabilidad y amplia vida útil con mínimo mantenimiento.
Nuestros sistemas emplean ultra condensadores de última generación. Esta tecnología tiene la ventaja de tener una más alta ciclabilidad que las baterías de ión de litio, lo que supone un menor coste a lo largo de la vida del KERS.